La impresión 3D, o fabricación aditiva como también se la llama, ha pasado de ser una idea loca a una tecnología que está cambiando industrias enteras. Pero, ¿cómo empezó todo? No fue cosa de un día para otro, la verdad. Es una historia con inventores, ideas que parecían de ciencia ficción y un montón de trabajo para llegar a las impresoras que vemos hoy en Mastoner.com y en fábricas por todo el mundo. Vamos a dar un paseo por esa historia.
Los Primerísimos Pasos de la Impresion 3D
Antes de que la impresión 3D se convirtiera en realidad, apareció primero en la imaginación. En los años 40 y 50, escritores de ciencia ficción como Murray Leinster y Raymond F. Jones ya fantaseaban con máquinas capaces de construir objetos a partir de dibujos o «sprays moleculares».
El primer intento real llegó en 1971, cuando Johannes F Gottwald patentó su «Liquid Metal Recorder«, que usaba polvo metálico similar a la tecnología de chorro de tinta. Sin embargo, este proyecto no progresó mucho.
En los 80 hubo varios avances significativos:
- En Japón (1981): Hideo Kodama inventó métodos para crear modelos 3D con polímeros endurecidos por luz UV, pero su patente quedó abandonada.
- En Estados Unidos (1984): Bill Masters patentó un sistema de fabricación automatizada, siendo el primero en usar el término «3D printing».
- En Francia (1984): Alain Le Méhauté, Olivier de Witte y Jean Claude André patentaron la estereolitografía, pero General Electric francesa abandonó el proyecto por no ver potencial comercial.
Estos pioneros, aunque muchos no tuvieron éxito inmediato, estaban sentando las bases para la revolución tecnológica que vendría después. El desarrollo de estas tecnologías era costoso y el mercado incierto, muy diferente a la accesibilidad actual de la impresión 3D.
¡Boom! Nacen las Bases: SLA, FDM y SLS Cambian el Juego
En los 80 surgieron tres tecnologías fundamentales para la impresión 3D:
- Estereolitografía (SLA) – Charles Hull, 1986- Usa resina líquida que se endurece con luz UV
- Hull creó el formato de archivo STL y fundó 3D Systems
- La SLA-1 fue la primera impresora 3D comercial
 
- Modelado por Deposición Fundida (FDM) – Scott Crump, 1989- Deposita filamento plástico derretido capa por capa
- Inspirado en una pistola de pegamento caliente
- Es la base de la mayoría de impresoras 3D actuales
 
- Sinterizado Selectivo por Láser (SLS) – Deckard y Beaman, 1986- Usa polvo (plástico, metal o cerámica) fundido por láser
- Permite geometrías complejas sin soportes adicionales
- Amplió el uso de materiales más allá de plásticos y resinas
 
Estas tecnologías pioneras sentaron las bases de la impresión 3D moderna al compartir el principio de construcción por capas a partir de diseños digitales.
No Solo Tres Sabores: El Abanico de Tecnologías 3D Se Abre
Vale, ya vimos las tres grandes que empezaron todo: SLA, FDM y SLS. Pero ¿se quedó ahí la cosa? ¡Ni mucho menos! El ingenio humano siguió buscando maneras de construir objetos capa a capa, y surgieron un montón de tecnologías más, cada una con sus truquillos. Vamos a ver algunas de las más importantes sin enrollarnos:
- Material Jetting: Como una impresora de inyección de tinta, pero en 3D. Un cabezal deposita gotitas de material que se endurecen con luz UV o calor.- ¿Para qué vale? Muy precisa, acabados lisos y permite múltiples materiales y colores simultáneamente. Ideal para prototipos realistas.
 
- Binder Jetting: Usa un «pegamento» líquido sobre capas de polvo (metal, arena, cerámica). La pieza suele necesitar post-procesado.- ¿Para qué vale? Rápida, económica y versátil. Sirve para prototipos, piezas funcionales y moldes de fundición.
 
- Deposición de Energía Dirigida (DED): Funde el material metálico justo al depositarlo, usando láser, haz de electrones o arco eléctrico.- ¿Para qué vale? Perfecta para reparar piezas metálicas valiosas o fabricar componentes de gran tamaño. Muy usada en aeroespacial y defensa.
 
- Fusión de Lecho de Polvo (PBF): Familia de tecnologías que usan energía para fundir partículas en una cama de polvo.- SLM/DMLS: Fusión completa de polvo metálico con láser para piezas densas y resistentes.
- EBM: Usa haz de electrones en vacío, excelente para titanio.
- MJF: Tecnología HP que combina agentes químicos y calor para fusión rápida y precisa.
- ¿Para qué vale? Creación de geometrías complejas con alta precisión, especialmente en metal. Fundamental en sectores como aeroespacial, medicina y automoción.
 

Del Plástico al Titanio: La Revolución de los Materiales
La impresión 3D evolucionó de hacer simples prototipos a fabricar piezas funcionales gracias a la expansión de materiales disponibles:
- Plásticos: PLA (biodegradable), ABS (resistente, como LEGO), PETG, Nylon y otros técnicos como ULTEM o PEEK.
- Metales: Acero inoxidable, aluminio, titanio (para implantes médicos), cobre y aleaciones especiales.
- Resinas: Estándar, resistentes, flexibles, transparentes, biocompatibles y calcinables.
- Cerámicas: Porcelana, gres y alúmina.
- Composites: Plásticos reforzados con fibra de carbono o vidrio.
- Innovaciones: Bio-tintas con células vivas, tintas conductivas para circuitos y materiales sostenibles.
El material determina las propiedades finales: resistencia, flexibilidad, peso, biocompatibilidad y conductividad. Algunos materiales como el Nylon requieren almacenamiento seco para evitar problemas de impresión.
Historia de la Impresión 3D: Linea de tiempo (1981-2025)
La evolución año por año de una tecnología que está cambiando el mundo, desde sus orígenes hasta las innovaciones más recientes en 2025.

Los Orígenes: Dr. Hideo Kodama
El Dr. Hideo Kodama del Instituto de Investigación Industrial Municipal de Nagoya inventa una de las primeras máquinas de prototipado rápido, utilizando fotopolímeros para construir modelos tridimensionales capa por capa.
El Dr. Kodama publicó su trabajo en el documento «Automatic method for fabricating a three-dimensional plastic model with photo-hardening polymer», sentando las bases teóricas y prácticas para lo que posteriormente se conocería como estereolitografía.

Chuck Hull Patenta la Estereolitografía
Charles «Chuck» Hull inventa la estereolitografía (SLA), tecnología que utiliza luz ultravioleta para curar resinas fotosensibles capa por capa, creando objetos tridimensionales.
Hull presentó su solicitud de patente el 8 de agosto de 1984, describiendo un sistema capaz de generar objetos tridimensionales mediante la sucesiva impresión de capas delgadas de material que se endurecía al exponerlo a luz ultravioleta, sentando las bases para la moderna impresión 3D.

Emisión Oficial de la Patente SLA
La Oficina de Patentes de EE.UU. concede oficialmente a Chuck Hull la patente para su tecnología de estereolitografía, marcando el nacimiento oficial de la impresión 3D comercial.
La patente US4575330A, titulada «Apparatus for production of three-dimensional objects by stereolithography», fue oficialmente concedida el 11 de marzo de 1986, otorgando a Hull y a su futura empresa los derechos sobre esta revolucionaria tecnología.

Primera Impresora 3D Comercial
3D Systems, la empresa fundada por Chuck Hull, lanza la SLA-1, considerada la primera impresora 3D comercial del mundo, iniciando la era industrial de la fabricación aditiva.
La SLA-1 representó un avance significativo en la fabricación, permitiendo a empresas crear prototipos rápidos sin necesidad de moldes o herramientas especiales. Su impacto fue inmediato en industrias como la automovilística y aeroespacial, que podían ahora iterar diseños mucho más rápidamente.

Nacimiento de SLS y FDM
Carl Deckard licencia su tecnología de Sinterizado Selectivo por Láser (SLS), mientras Scott Crump inventa el Modelado por Deposición Fundida (FDM), dos tecnologías que dominarían el futuro de la impresión 3D.
La tecnología SLS utiliza un láser para fundir materiales en polvo, permitiendo crear objetos con complejas geometrías internas. Por su parte, el FDM funciona extruyendo filamentos de plástico fundido capa por capa, convirtiéndose posteriormente en la tecnología más común en impresoras 3D de consumo.

Fundación de Stratasys
Scott Crump patenta su tecnología de Modelado por Deposición Fundida (FDM) y funda Stratasys, que se convertiría en uno de los gigantes de la industria de impresión 3D a nivel mundial.
La patente de Crump describía un sistema que depositaba material fundido capa por capa para crear objetos tridimensionales. Este método resultó ser más accesible y seguro que la estereolitografía, al no requerir resinas tóxicas ni láser, lo que eventualmente permitiría su adopción masiva en el mercado de consumo.

Expansión Industrial del 3D
La década de los 90 vio un crecimiento exponencial de la industria de impresión 3D, con el desarrollo de nuevas tecnologías y las primeras aplicaciones médicas revolucionarias.
Durante esta década aparecieron tecnologías como el Jetted Photopolymer (similares a impresoras de tinta pero con fotopolímeros) y mejoras significativas en SLS. En medicina, se comenzaron a imprimir modelos de órganos para planificación quirúrgica y las primeras prótesis personalizadas, abriendo el camino para la revolución médica que vendría posteriormente.

Revolución Médica: Primer Órgano Impreso
Se realiza con éxito el primer trasplante de un órgano creado mediante tecnología de impresión 3D: una vejiga impresa con células del propio paciente sobre un andamiaje biodegradable.
Este hito médico, liderado por el Dr. Anthony Atala en el Instituto Wake Forest de Medicina Regenerativa, demostró el potencial de la bioimpresión para crear órganos funcionales, abriendo la puerta a futuros desarrollos en medicina regenerativa y reduciendo el riesgo de rechazo en trasplantes al utilizar células del propio paciente.

Nace el Proyecto RepRap
El Dr. Adrian Bowyer inicia el Proyecto RepRap, con el objetivo de crear impresoras 3D open-source y auto-replicantes que pudieran producir sus propias piezas, democratizando el acceso a esta tecnología.
RepRap (Replicating Rapid Prototyper) buscaba crear máquinas capaces de imprimir la mayoría de sus propios componentes. Este proyecto abierto revolucionó la industria al permitir que cualquier persona pudiera construir su propia impresora 3D a bajo costo, iniciando la ola de impresión 3D de consumo y fomentando una comunidad global de innovadores.

Avances Comerciales y Expiración de Patentes
Se lanza la primera impresora SLS comercial para plásticos, expiran las primeras patentes clave de FDM y la empresa Objet introduce su primera impresora 3D de escritorio con tecnología PolyJet.
La expiración de las patentes originales de FDM fue un punto de inflexión para la industria, permitiendo que muchas startups comenzaran a desarrollar impresoras 3D accesibles basadas en esta tecnología. Esto, combinado con los avances en miniaturización, sentó las bases para la revolución de las impresoras 3D personales que ocurriría en los años siguientes.

La Primera RepRap: Darwin
Se lanza «Darwin», la primera impresora del proyecto RepRap capaz de imprimir una parte significativa de sus propios componentes, marcando el inicio de la democratización de la impresión 3D.
Darwin, nombrada en honor a Charles Darwin, podía reproducir aproximadamente el 50% de sus propias piezas. Su diseño y software fueron liberados bajo licencias abiertas, permitiendo a cualquier persona descargar, modificar y construir su propia impresora. Este enfoque revolucionario ayudó a reducir el costo de la tecnología de impresión 3D de decenas de miles a cientos de dólares.

Servicios y Avances Médicos del 3D
Se funda Shapeways, uno de los primeros servicios de impresión 3D bajo demanda, y se implanta la primera prótesis de pierna completamente impresa en 3D, personalizada para el paciente.
Shapeways revolucionó el acceso a la impresión 3D al permitir que cualquier persona pudiera diseñar un objeto y recibirlo impreso sin necesidad de poseer una impresora. Por otro lado, la prótesis de pierna marcó un hito en la medicina personalizada, demostrando cómo la impresión 3D podía crear soluciones perfectamente adaptadas a cada paciente a un costo significativamente menor que los métodos tradicionales.

Nuevas Plataformas de Innovación 3D
Se funda MakerBot, una de las primeras empresas en ofrecer impresoras 3D asequibles para el consumidor, y nace Kickstarter, plataforma que sería clave para financiar numerosos proyectos de impresión 3D.
MakerBot, fundada por Bre Pettis, Adam Mayer y Zach Smith, fue una de las primeras compañías en comercializar masivamente impresoras 3D basadas en el proyecto RepRap. Su primera impresora, la Cupcake CNC, ayudó a llevar la tecnología a hogares, escuelas y pequeñas empresas. Paralelamente, Kickstarter se convertiría en una plataforma vital para financiar startups y proyectos innovadores en el campo de la impresión 3D.

Era Industrial: Impresión 3D en Metal
La industria aeroespacial comienza a utilizar impresión 3D en metal para producir piezas finales de aviones, mientras los precios de las impresoras 3D de consumo bajan considerablemente, popularizando la tecnología.
La impresión 3D en metal representó un salto cualitativo, permitiendo crear componentes ligeros con geometrías imposibles de fabricar mediante métodos tradicionales. Empresas como Boeing y Airbus comenzaron a incorporar piezas impresas en 3D en sus aviones, reduciendo peso y mejorando la eficiencia de combustible. Al mismo tiempo, el mercado de consumo vio una explosión de impresoras por debajo de los $1,000, llevando la tecnología a un público mucho más amplio.

Avances en Transporte y Consumo
Nace Ultimaker, una de las empresas más importantes en impresoras 3D de código abierto. Se imprime el primer avión no tripulado y se presenta el prototipo del coche Urbee, con carrocería totalmente impresa en 3D.
Ultimaker se convertiría en uno de los líderes del mercado de impresoras 3D de alta calidad. El avión no tripulado SULSA (Southampton University Laser Sintered Aircraft) demostró las capacidades de la impresión 3D para crear vehículos funcionales. Por su parte, el Urbee, diseñado por KOR EcoLogic, fue el primer automóvil con carrocería completamente impresa en 3D, optimizado para eficiencia aerodinámica y bajo consumo de combustible.

Sostenibilidad y Avances Médicos
Se desarrolla el sistema Filabot para reciclar plástico en filamento para impresoras 3D. Se implanta la primera mandíbula de titanio impresa en 3D y se produce la fusión entre Stratasys y Objet por $1.4 mil millones.
El Filabot, creado por Tyler McNaney, permitía convertir plásticos reciclados en filamento utilizable, representando un paso importante hacia la sostenibilidad en impresión 3D. En Bélgica, una paciente de 83 años recibió la primera mandíbula completa impresa en titanio, un hito en implantes personalizados. La fusión Stratasys-Objet creó uno de los gigantes de la industria, combinando tecnologías complementarias.

Reconocimiento Político
El presidente Barack Obama menciona la impresión 3D en su discurso del Estado de la Unión como una tecnología revolucionaria que tiene el potencial de transformar la manera en que fabricamos casi todo.
El reconocimiento por parte del presidente Obama representó un momento decisivo para la aceptación mainstream de la impresión 3D. En su discurso, destacó cómo esta tecnología podría revitalizar la manufactura estadounidense y anunció la creación de centros de innovación enfocados en impresión 3D, respaldados con inversiones federales. Este apoyo gubernamental aceleró la adopción industrial de la tecnología.

Nuevas Fronteras: Comida y Construcción
Se realiza la primera impresión 3D de alimentos en la Estación Espacial Internacional y se imprime la primera casa completa en China en solo 24 horas, ampliando las aplicaciones de la tecnología.
La impresora de alimentos en la ISS, desarrollada por Systems & Materials Research Corporation, demostró cómo la impresión 3D podría resolver problemas de nutrición y desperdicio en misiones espaciales. Mientras tanto, la empresa china WinSun revolucionó la construcción imprimiendo 10 casas en un solo día utilizando residuos de construcción reciclados, mostrando el potencial para crear viviendas asequibles y sostenibles rápidamente.

Revolución en Bioimpresión
La empresa Cellink lanza al mercado la primera bio-tinta comercial para impresión 3D de tejidos vivos, democratizando el acceso a la bioimpresión para laboratorios e instituciones de investigación.
La bio-tinta de Cellink estaba compuesta por nanocelulosa y alginato, permitiendo imprimir estructuras 3D con células vivas embebidas. Este avance facilitó que más investigadores pudieran acceder a la tecnología de bioimpresión sin necesidad de desarrollar sus propios materiales, acelerando la investigación en ingeniería de tejidos, pruebas de medicamentos y medicina regenerativa.

Fabricación Espacial con 3D
Los astronautas de la Estación Espacial Internacional utilizan por primera vez una herramienta completamente diseñada e impresa en el espacio, marcando un hito en la fabricación orbital.
Esta llave de tuercas, diseñada en la Tierra y transmitida digitalmente a la ISS, demostró cómo la impresión 3D podría revolucionar las misiones espaciales al permitir fabricar herramientas y repuestos bajo demanda sin necesidad de transportarlos desde la Tierra. Este concepto de «fabricación en órbita» se considera esencial para futuras misiones de larga duración a Marte y más allá.

Construcción a Gran Escala con 3D
Se completa el edificio funcional impreso en 3D más grande del mundo hasta la fecha, y la impresión 3D se consolida como método estándar para la fabricación de audífonos personalizados a nivel global.
El edificio de dos pisos con más de 640 metros cuadrados fue construido en Dubai utilizando una impresora 3D de 15 metros de altura. En el sector médico, más del 95% de los audífonos a nivel mundial comenzaron a fabricarse mediante impresión 3D, un ejemplo perfecto de cómo esta tecnología puede revolucionar completamente una industria proporcionando productos altamente personalizados a costos reducidos.

Consolidación Industrial en Impresion 3D
El valor global de moldes, herramientas y piezas finales impresas en 3D alcanza los $5.2 mil millones, demostrando la consolidación de esta tecnología como método de fabricación industrial.
A pesar de la pandemia de COVID-19, o quizás impulsado por ella, el sector industrial de la impresión 3D continuó creciendo. La crisis sanitaria demostró el valor estratégico de esta tecnología, cuando miles de makers y empresas reorientaron sus impresoras para producir equipos de protección personal y componentes médicos críticos, revelando la flexibilidad y capacidad de respuesta rápida que ofrece la fabricación aditiva.

Primera Prótesis Ocular Impresa en 3D
Se implanta el primer ojo protésico totalmente impreso en 3D a un paciente en Reino Unido, reduciendo drásticamente el tiempo de fabricación y mejorando el realismo de la prótesis.
Desarrollado por el Hospital Moorfields Eye y el UCL Institute of Ophthalmology, este ojo protésico impreso en 3D redujo el tiempo de producción de 6 semanas a solo 2-3 semanas, con una sesión de adaptación de solo media hora comparada con las 2 horas tradicionales. Además de ser más rápido de producir, el ojo impreso ofrece una apariencia más realista, con una pupila más definida y profundidad en la córnea.

Impresora 3D Más Grande del Mundo
La Universidad de Maine presenta oficialmente la impresora 3D más grande del mundo, capaz de imprimir estructuras de hasta 30 metros de largo por 10 metros de ancho y 5 metros de alto.
Bautizada como «Factory of the Future», esta impresora gigante utiliza materiales compuestos de bioplásticos reforzados con celulosa derivada de la madera, aprovechando los recursos naturales de Maine. La universidad ya ha utilizado esta tecnología para imprimir el barco más grande del mundo fabricado con impresión 3D y componentes para construcciones modulares sostenibles.

Vasos Sanguíneos Artificiales
Investigadores desarrollan vasos sanguíneos artificiales impresos en 3D con resistencia comparable a los naturales, abriendo nuevas posibilidades para trasplantes personalizados y tratamientos cardiovasculares.
Estos vasos sanguíneos artificiales, desarrollados por un equipo internacional de científicos, utilizan una combinación de biotintas con células madre del paciente y matrices proteicas que imitan la estructura natural de los vasos. Las pruebas iniciales en modelos animales mostraron resultados prometedores, con vasos que mantuvieron su integridad y funcionamiento durante más de seis meses sin signos de rechazo inmunológico.
El Futuro de la Impresión 3D (2025)
El horizonte de la impresión 3D promete avances revolucionarios que cambiarán para siempre nuestra forma de fabricar, construir y hasta curar enfermedades. Estos son algunos de los desarrollos que se esperan para el próximo año.
Fabricación Biológica Avanzada
Se espera un importante avance en la bioimpresión 3D con nuevos biomateriales que permiten la creación de órganos funcionales con vascularización compleja. Estas innovaciones prometen revolucionar los trasplantes médicos y reducir drásticamente las listas de espera para pacientes críticos.
Proyectos NASA/Nikon
La NASA y Nikon planean lanzar nuevas colaboraciones para desarrollar tecnología de impresión 3D de ultra precisión para componentes espaciales críticos, empujando los límites de la manufactura en microgravedad.
Cohete Neutron
Se espera el lanzamiento del primer cohete Neutron de Rocket Lab, con más del 80% de sus componentes fabricados mediante impresión 3D, representando un hito en la industria aeroespacial.
Eventos Destacados
WAAMathon 2025, ADDITIV Metals y Addit3D serán algunos de los eventos clave donde se presentarán las próximas innovaciones en impresión 3D industrial y se forjarán alianzas entre investigadores y empresas.
 
 